Este verano he visitado Polonia, un país muy castigado por la historia.En el Siglo XVIII fue borrado literalmente del mapa europeo por obra y gracia de los austrohúngaros y prusianos que se la repartieron, pero fue en 1939 ,con el estallido de la II Guerra Mundial, cuando Polonia sufre su peor pesadilla.El 90 por ciento del país fue destruido por los nazis y gran parte de su población(judios, gitanos..) fue exterminada en los campos de concentración.Pero Polonia salió adelante y fue reconstruida, gracias a las esfuerzos del pueblo polaco que ha conseguido mantener viva su quintaesencia.
Actualmente la capital de Polonia es Varsovia, una urbe europea, convertida en un auténtico centro cultural.
Sus callejuelas están rodeadas de edificios históricos, fosas y barbacanas como estas.
La Plaza del Mercado es de gran belleza.
Un edificio notable del centro histórico es la Catedral de San Juan Bautista..
No dejeis de visitar el Palacio Real, que a lo largo de su historia ha sido constantemente remodelado y ampliado.
Fue residencia de los reyes polacos.
Las numerosas salas y el gabinete de mármol son un testimonio del extremo refinamiento de la época.
La Universidad con sus majestuosos edificios y una estatua del gran científico Copérnico
Justo en el extremo sur de la ciudad teneis el Parque Lazienki, el parque público más grande de Varsovia.
Alberga un conjunto palaciego y cuenta con un lago y un jardín botánico..
Es famoso por albergar un monumento al compositor Frederic Chopin,
así como numerosos palacetes y pabellones, convertidos hoy en museos..
Pero Varsovia también guarda un lugar muy destacado al ghetto judio con este
Museo de la Historia de los Judios polacos, un lugar de encuentro para varias culturas, lenguas y religiones.
Y un recuerdo a todos aquellas personas que dieron su vida por su madre Tierra, luchando contra la ocupación nazi en una guerra desigual que duró 63 días..
El Monumento al Levantamiento de Varsovia, ocurrido en 1944, consta de dos partes.La primera representa a los insurgentes mientras salen corriendo debajo de los pilares de un puente.
Y la segunda muestra a un grupo de soldados entrando en un sistema de canales.
Un episodio heroico y trágico a la vez que quedó grabado para siempre, en los anales de la historia de esta ciudad.
