La Romería de Valme ha vuelto a transformar hoy las calles de Dos Hermanas en un río de color, música y alegría compartida. Miles de vecinos y visitantes han acompañado la tradicional comitiva en una jornada que encarna la esencia popular y festiva de la ciudad, entre flores de papel, trajes de flamenca y el sonido de palmas y guitarras.
Desde primera hora, las carretas y galeras, verdaderas obras de arte elaboradas con flores de papel rizado, se abrieron paso entre una multitud que celebraba con emoción el día grande de Dos Hermanas. Cada carreta mostró un trabajo artesanal que combina tradición, creatividad y dedicación, un patrimonio popular que define el carácter de esta fiesta declarada Bien de Interés Cultural y Fiesta de Interés Turístico de Andalucía.
Durante todo el recorrido, la música de sevillanas marcó el ritmo de los grupos de amigos y familias que llenaron el camino de animación. Caballistas con traje corto, amazonas con mantoncillo y carretas adornadas en tonos vivos pusieron el sello andaluz a una jornada donde el encuentro social y la convivencia fueron protagonistas. El ambiente festivo, reforzado por el buen tiempo, acompañó cada momento de la romería, desde el centro hasta Bellavista.
Con más de 130 años de historia, la Romería de Valme sigue siendo un símbolo de identidad nazarena. Generaciones enteras repiten este recorrido que mezcla costumbre, arte y sentimiento colectivo, manteniendo viva una de las celebraciones más queridas del calendario andaluz. Hoy, una vez más, Dos Hermanas volvió a ser pueblo, volcada en su cita más esperada del año.