Toro

Esta semana os llevo a Toro, un pueblecito zamorano cargado de historia, con un bonito paseo junto al Duero.

El gran Tesoro de Toro es su Colegiata, un poderoso edificio de estilo románico con un cimborrio en el que hay mucho que admirar.

Es la Iglesia Mayor, todo un testimonio plástico de la importancia alcanzada en Toro en el Siglo XIII.
De su interior destacamos la portada de la Majestad, esculpida en piedra, que conserva su policromía original.

En la Sacristía cabe destacar una tabla flamenca del S.XVI , un Calvario de marfil y carey de estilo barroco y otros retablos..

Otra iglesia de interés es la Iglesia de San Salvador que perteneció a la Orden de los Caballeros del Temple y que actualmente es un Museo de Arte Sacro.
El Alcázar, símbolo de la importancia estratégico-militar de Toro en el medievo.

El berraco celtibérico , situado en una rotonda, que dio nombre a la ciudad y definió su blasón.

Os llamarán la atención dos puertas:-La Puerta de la Corredera, que se construyó en 1602 en honor de Felipe II.

Y la Puerta del Mercado, también llamada Torre del Reloj..

En la Plaza del Ayuntamiento vimos este curioso árbol navideño, realizado con botellas de vidrio, en clara alusión a la riqueza del vino en la localidad..

Y terminamos la visita junto al Duero y su Puente Mayor.Aunque su origen es romano, su trazado actual responde al Románico tardío..