El eremitorio rupestre de San Vicente en Cervera de Pisuerga es un interesante monumento medieval excavado directamente en la roca.
Este eremitorio se encuentra a unos 500 metros al sureste de Cervera, cerca de la población de Vado, antes de la confluencia del río Rivera con el Pisuerga. Está compuesto por varias estancias excavadas en la roca, incluyendo una capilla, una sala de oración y algunas celdas donde vivían los eremitas.
La estructura principal del eremitorio tiene una longitud de aproximadamente 7 metros y está orientada hacia el este. Tiene dos grandes aberturas en la zona oriental, una de las cuales era el único punto de acceso original a través de una serie de escalones tallados en la piedra. Posteriormente, se horadó un nuevo acceso lateral en uno de los arcosolios.
La cabecera del eremitorio también está tallada en la roca, con el encastre para el pie del altar, aunque la estructura de cierre original de mampostería ha desaparecido. Alrededor del eremitorio se encuentra una necrópolis rupestre con varias tumbas excavadas en la roca.
Este tipo de eremitorios rupestres medievales, excavados directamente en la piedra, son una manifestación religiosa cristiana arcaica, a menudo asociada a eremitas que buscaban refugio del invasor islámico.
