Esta es la segunda vez que voy a Frigiliana y cada vez que la visito me parece más bonita.La pirmera vez fui en verano y me llamó la atención su impecable casco urbano, pero ahora estaba tan florecida y cubierta de plantitas que me emocionó..
Los patios de Córdoba no tienen nada que envidiar a estas callejuelas llenas de macetas, árboles y rincones llenos de encanto..
Además sorprende la cantidad de tiendas de artesanía que podeis encontrar aquí que ofrecen al turista desde vino, miel y dulces hasta collares, pulseras, vestidos , pañuelos y bolsos..
Una de las calles más típicas es la Calle del Real y otras el Callejón del Inquisidor y la Chorrera..
Si recorreis la Calle del Real llegareis hasta la Iglesia de San Antonio de Padua con este bonito altar..
y su plazoleta poblada de veladores..
Frigiliana un lugar mágico y encantador que no dejará a nadie indeferente..Sólo hay que ver la cantidad de turistas que hay siempre pululando por sus calles.
