Si quereis pasar un fin de semana agradable en un pueblecito pequeñito y tranquilo de la Costa del Sol, os recomiendo que vayais a Manilva.Su privilegiado entorno natural le ha convertido en un municipio de gran reconocimiento por sus productos agrícolas, especialmente sus viñedos.Tanto es así que la villa posee un Centro de Interpretación de las Viñas.
Este Centro es un espacio creado para la salvaguarda de esta herencia cultural tan importante en Manilva.Entre otras acciones el Centro lleva a cabo un Plan de Formación Profesional especializado en vinicultura.De esta forma se persigue evitar el envejecimiento del sector y formar a las nuevas generaciones en la cultura del vino.
Cerca de allí encontrareis la Plaza de la Vendimia con azulejos relativos a la viña
Cepas de vides
Y unos toneles con las distintas variedades de vino:seco, semi, dulce, moscatel..
Esta que veis es la Iglesia Parroquial de Santa Ana y es el monumento religioso más importante de todo el núcleo urbano de Manilva.Fue levantada entre los años 1776 y 1783 sobre los restos de un antiguo templo del siglo XVI.
La Fuente con el Reloj que nos recuerda en una placa que el 26 de octubre de 1796 se le otorgó el Real Privilegio de Villa, siendo Rey Fernando VII.
El Castillo de la Duquesa.Se encuentra a unos 100 metros del mar y a lo largo de su historia hizo las veces de fortín, Cuartel de los Carabineros y Cuartel de la Guardia Civil.
En su interior se encuentra el Museo Arqueológico de Manilva con multitud de detalles.
Y no nos podemos ir de Manilva sin darnos un paseito por sus playas..
Su faro..
e incluso descubrir una estatua de un sensual sirena que protege a los pescadores, pues sostiene entre sus brazos una gran cantidad de redes..
Tiene cepas de verdad
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