Resulta tan llamativa para los insectos que son muchos los que se pasan por allí para libar su néctar...
Una avispa, que volaba por allí, no se lo ha pensado dos veces y se ha metido dentro de la flor...
Cuidadito que como salga y me encuentre con la cámara tan cerca, me va a picar...Mejor me voy...
