Temia

Temía que me rechazaran, hasta que... entendí que debía tener fe en lo que soy.
Temía fracasar hasta que... me di cuenta de que únicamente fracaso si no lo intento.
Temía lo que la gente opinara de mi hasta que... me di cuenta de que de todos modos opinarían de mi.
Temía al dolor, hasta que... aprendí que este es necesario para crecer.
Temía a la verdad, hasta que... descubrí la fealdad de las mentiras.
Temía a la muerte, hasta que... aprendí que no es el final sino mas bien el comienzo.

Temía al odio, hasta que... me di cuenta que no es otra cosa mas que ignorancia.
Temía al ridículo, hasta que... aprendí a reirme de mi mismo.
Temía hacerme viejo, hasta que... comprendí que ganaba sabiduría día a día.
Temía al pasado, hasta que... comprendí que no podía herirme mas.
Temía a la oscuridad, hasta que... vi la belleza de la luz de una estrella.
Temía al cambio, hasta que... vi que aun la mariposa mas hermosa necesitaba pasar por una metamorfosis antes de volar.
Hagamos que nuestras vidas cada día tengan más vida y si nos sentimos desfallecer... no olvidemos que al final... siempre hay algo más.

La Fabula del Buho y el saltamontes

No sé a vosotros, pero a mi me gustan los buhos.Con sus ojitos saltones y la extraordinaria flexibilidad de su cuello que puede girar hasta 180 grados, es una de las aves más llamativas que existen .

Compañero inseparable de la Diosa Minerva, era considerado como símbolo de la Sabiduría en la Antigüedad..

Hace poco tuve la suerte de ver uno gigante en un mercadillo medieval y aquí os lo traigo junto con una fábula..

Un búho, acostumbrado a alimentarse por la noche y dormir durante el día, fue enormemente molestado por el ruido de un saltamontes y seriamente le suplicó que  dejara de chillar. El saltamontes rechazó la petición, y chilló más alto, y a su vez más alto el búho volvía a suplicarle. Cuando vio que no podía conseguir ninguna bondad y que sus palabras eran despreciadas, el búho atacó al parlanchín con una estratagema.

--Ya que no puedo dormir,-- dijo, --debido a su canción que, créame, es dulce como la lira de Apolo, me complaceré en la bebida de un néctar que Pallas últimamente me dio. Si no le disgusta, venga conmigo y lo beberemos juntos.--

El saltamontes, quién tenía sed, y complacido con la alabanza para su voz, con impaciencia aceptó. El búho lo esperó al frente de su hueco, lo agarró, y lo usó para su cena.

Ser intolerante solo conduce a ser rechazado y al fracaso.

Visita al Museo del Mantecado en Estepa

Estepa es conocida por ser la cuna de los mantecados.Este original dulce navideño se fabrica en muchos sitios de la geografía española, pero en ninguna parte encontrareis el sabor y la calidad de los polvorones de Estepa...

 

El origen del mantecado data del siglo XVI, propiciado por el excedente de cereales y manteca que se daba en esta parte de Andalucía.Sin embargo, fue en el XIX cuando comienza su comercialización en cadena.Fue en estas fechas cuando la familia Galván acuña la marca "La Estepeña", pero no sería hasta 1986 cuando se decidieran a abrir la primera fábrica , en la que hoy en día se elaboran sus famosos mantecados.

Para conocer, de primera mano, como se hacen los mantecados, os invito a visitar el Museo del Mantecado que la Estepeña posee en la calle Almendra de esta localidad.
Los ingredientes básicos que encontramos en los polvorones y mantecados son la harina de trigo, grasa de cerdo o manteca, almendras y azúcar.Después se añadirá la canela, el ajonjolí, el chocolate, la vainilla o el limón..., dependiendo de cada una de las variedades.

Como veis, en este museo se representan los orígenes de la elaboración de los mantecados y polvorones a través de un obrador de confitería artesano de principios de siglo XX

Y si os gusta el chocolate, no os perdais la ciudad del Chocolate.Toda una villa construida con chocolate blanco y negro..

 

Una ciudad a la que no le falta ningún detalle y que huele tan bién que dan ganas de comersela enterita..

Y como  curiosidad,  sus 20 fuentes de las que manan miel, azúcar, piñones, almendras, nueces, ajonjolí y hasta pasas..Y es que por las fuentes de la Estepeña ríos de aromas pasan...

 

A todos los que visiteis la fábrica de la Estepeña os regalarán un cajita con una pequeña selección de productos típicos, para que probeis este dulce manjar., así que animaros...

Puerto Gelves

A tan sólo 3,5 kms de Sevilla encontrareis Puerto Gelves, uno de los puertos deportivos sevillanos emplazados en el Río Guadalquivir que cuenta con más fama por sus instalaciones y servicios...

Posee una escuela naútica y una zona de parking para las autocaravanas entre la dársena del puerto y el río Guadalquivir, con vistas a ambos lados...
Tienen una capacidad de flote de 150 unidades y sus pantanales tiene 305 metros en total..

Y cuenta con su propio taller de reparaciones para los barcos..

Si os dais un paseo por el puerto encontrareis barcos de todo tipo desde yates y catamaranes...

hasta casitas flotantes como esta..¡Qué mona con sus cortinas y todo..!

Pero en Puerto Gelves los barcos comparten su espacio con otros seres vivos como las ocas..

o este curioso minino blanco....

Y es que su proximidad al Parque Natural de Doñana hacen de Gelves un lugar ideal para el descanso y todo tipo de actividades recreativas, y permite observar una gran variedad de aves migratorias  que ,en su paso a otros continentes, anidan en estos parajes..